miércoles, 17 de agosto de 2011

¿Qué es el dinero?


 El dinero es un buen disparador para hablar sobre un cambio en la consciencia del mundo. Nada más.

 Si estamos de acuerdo en que el mundo esta atravesando por una crisis existencial, donde el individuo no encuentra un significado a su vida, y que las consecuencias son maneras violentas de actuar y pensar... si estás de acuerdo con esta premisa, entonces, seguimos con el razonamiento.
  En este mundo el dinero es el valor más preciado para un individuo.
 
 ¿Quién ve lo que ahí está implicado?
  
 En un mundo donde se perdió el sentido de Ser, la estimación por el dinero es altísima.
  
 ¿Qué conclusión puede sacarse? ¿es difícil?
  
 No, lo que es difícil es ver esa realidad, y aceptar el razonamiento como verdadero.
  
 p y q son verdaderos.
  
 p: la raza humana no sabe para qué vive, esta perdida.
 q: Hay actos violentos y falta de significados.
  
 Si lo que adora una existencia de esas características es Dinero.

 ¿Entonces el dinero es algo violento y falto de significado?

 Podemos decirlo de la siguiente forma:

 Una humanidad perdida, con falta de significado y violenta crea algo como el dinero.
  ¿Algo como el dinero es igualmente falto de sentido y violento?

 No puedo dar la respuesta, sólo estoy en condiciones de plantear la problemática.

 Además, ¿violento para qué o para quién? ¿falto de sentido desde qué punto de vista?
        
 Hemos creado un sistema de convivencia donde necesito dinero para comer.
 Hemos creado un sistema de convivencia donde necesito dinero para vestirme.
 Hemos creado un sistema de convivencia donde necesito dinero para dormir en un hogar calentito.
        
 ¿Qué clase de sistema de convivencia es ese?
        
 No me sale más que describir hechos y hacer preguntas jajaj. Porque no es difícil de contestar "¿Qué es el dinero?".
        
 El dinero es una ambición y una perversión. No es más que una especie perdida en el universo buscando sentido a la vida en la materia cambiante y fluctuante.
        
 Es lo que renta la película de nuestra vida. Que todos vamos moldeando y creando a medida que tenemos más dinero.
        
 En lugar de observar la belleza de una planta, la compramos.
 En lugar de observar la belleza de una mujer, la prostituimos.
        
 ¿Qué tipo de mente creó el dinero? ¿Qué tipo de gente se desvive por el dinero? ¿No esta claro eso?
        
 El dinero son los barrotes de la cárcel del mundo.
   
 Es simplemente perdición e injusticia.
 Si habría justicia, ¿haría falta dinero?. Si no habría perdición, ¿haría falta dinero?
        
 ¿Será que el dinero es la causa de la injusticia y la perdición?  ¿Será una retroalimentación constante entre causa y efecto?
        
 Una cosa puedo decir. Así como cuando el veneno de una serpiente penetra en nuestro cuerpo, en nuestras células, la cura no es arrebatar el veneno de dentro, sino aplicar un antídoto contrarrestante del efecto mortal... el dinero es el veneno del mundo, y ya no es posible arrebatarlo, tiene que ser inhibido por un antídoto, el antídoto del significado de la vida.

     ¿Es realmente necesario el dinero para la Vida?
        
               Les deseo lo mejor, con todo el amor del mundo.

Lic. en Filosofía



¿Por qué estas estudiando una carrera académica tradicional como es Lic. En Filosofía?  ¿Acaso la cursada no te da una visión mental del ser humano? Es decir, el fin último es comprender y dominar la mente, entonces, ¿por qué aceptas un conocimiento confuso y que alimenta a lo causante de tanta desigualdad y desasosiego en el mundo?

 Gran pregunta, es extensa la explicación.

 La carrera te da una visión mental del ser humano. Esto simplemente quiere decir que no te da una visión absoluta. Lo mental es lo relativo, el entendimiento último es absoluto.
 No hay por qué negar alguno de los dos. Nuestra cultura, y dentro de ella la carrera de filosofía clásica, esta negando la visión absoluta. Esta tomando al humano dentro de un marco relativo en la existencia.
 Si yo negara ese marco relativo de la existencia humana y me quedara solo con el absoluto conocimiento de que el Ser es Uno y eso basta, estaría quedándome cojo igual que aquellos. Porque ese absoluto no me llevaría a ningún lugar, porque de hecho, conocer al Ser es el único conocimiento que no te lleva a tomar ninguna decisión, que no te influye, que no te lleva por ningún camino. Simplemente conocés que Sos, ¿qué se puede hacer con eso?  Si yo aprendo a cortar madera, posiblemente ese conocimiento me lleve a poder construir una mesa, no creo que termine yo piloteando un avión o vacunando animales por haber cortado una madera. Un conocimiento te condiciona hacia una dirección determinada, tiene límites, esos límites son los cordones del sendero por el cual te llevan.
 Con el conocimiento Absoluto, no pasa eso. No te lleva por ningún camino. Es un conocimiento que no condiciona, no es condicionante. ¿Cómo puede ser?  Porque no tiene límites, por el contrario, abre las fronteras, y derriba las barreras de toda condición que se haya adquirido mediante cualquier proceso cognitivo. Abre, no cierra. Te vuelve incondicional, no condiciona.
 Por eso es que uno no puede ir a ningún lado, el conocimiento de Ser no es productivo. Todo conocimiento sí, pero este último no. Sólo te enseña a ver, eso no condiciona, lo que condiciona es el objeto que mirás, en el que te enfocás.

 Simplemente el Absoluto es un conocimiento paralizador si uno no intenta trasponerlo a la mente. El conocimiento mental y el absoluto son dos polos, el relativo y el susodicho. Un equilibrio es necesario. Sin el Norte y el Sur, la Tierra se saldría de su eje, y sería un desastre. Sin el Absoluto y el Relativo, el ser humano se sale de su eje y el resultado es patético en cualquier caso.

 El conocimiento de la filosofía clásica es el resultado de un intento por comprender el comportamiento y la condición de ser humano. El objeto o el material de estudio es la vida terrena o una dimensión superficial del humano. Esa filosofía intenta rescatar al hombre de esa superficialidad, que no sea una mera materia en movimiento, un animal. Intenta echar una luz divina en la existencia del hombre, pero esa luz viene de los movimientos intelectuales de la mente, de la propia mente. Así, si bien se intenta tocar lo Absoluto con aspiraciones mentales, por otro lado, los movimientos y el conocimiento del pensar impiden por su propia naturaleza, bañar de luz el comportamiento, bendecir la existencia humana, darle un sentido a la vida. Es por eso que ningún filósofo ha podido realmente darnos el sentido de la vida.
 Un sentido, un significado, exige una visión completa, acabada de la vida. Exige echar luz en una dirección que se sepa como irrebatible, absoluta. Pero ningún filósofo clásico, de tradición, puede producir una revelación semejante. Sus teorías siempre tienen un punto de crítica, refutación y superación. ¿Por qué?    Porque su conocimiento es relativo, pertenece al campo de la relatividad de la existencia humana, allí todo cambia y se muta, todo se rearma, reproyecta, repiensa.

 Más allá de este pensamiento relativista, existe el acontecimiento o conocimiento absoluto. Acontecimiento y conocimiento son equivalentes aquí. El Absoluto acontece ante nosotros, al mismo tiempo lo conocemos. El Absoluto no puede construirse paso a paso. Se conoce o no. Sólo se conoce si acontece y acontece porque ya se lo conoce. Aquí está. Siempre.
 Nada puede uno hacer. Es. Pero con esto… no hacemos nada.

 Sólo es posible hacer en el marco de lo relativo, de lo cambiante, de lo construible. Y es necesario hacer porque así lo pide la vida… escuchá a tu cuerpo, pide que te muevas; percibí a tu intelecto, pide comprender más.
 El ser humano se mueve en un marco relativo, dentro de un marco absoluto. El movimiento se da en el marco relativo, fútil, de la existencia; en los parámetros absolutos solo existe la quietud del Ser.

 Pero con ser no hacemos nada, es por eso que hago algo. Estudio, e intento comprender el panorama relativo que ha creado el pensamiento humano, desde la visión de un Dios que se ha encontrado a sí mismo.  Desde la visión del Absoluto descansando en sí mismo.

 Nada más hay por hacer pero… la vida continúa.

 Continuando con la pregunta, vos decís: “el fin último es comprender y dominar la mente”. Estoy de acuerdo en que uno de los objetivos más elevados es comprender la mente, aunque suena confuso: si yo comprendo la mente ¿quién es el que comprende y con qué?  Si la mente es el gran instrumento de comprensión, ¿hay otro instrumento con el cual comprender? ¿Y que a su vez comprenda el complejo aparato de la mente?
No estamos hablando de entender los mecanismos de la mente, sueños, actos fallidos, memorias, deseos, entre otras, sino que estamos hablando de comprender a la mente en sí misma, como ente viviente. Como algo que existe, que esta ahí por algún motivo y nos lleva, nos arrastra por la vida con sus miserias e inseguridades. ¿podemos comprender la existencia de la mente? Sí, puede que no sea tarea sencilla. En la famosa película, Neo tuvo que esperar 3 episodios para salir de la matrix! Jajaja . Es una tarea ardua, pero vale la pena.

 Ese “comprender la mente” es una bella expresión porque implica que aún hay una instancia trascendental a la misma, sino no sería posible comprenderla.
 El reino animal, no pude comprenderla. ¿por qué? Porque ellos están lejos del absoluto. Pero el Este vive en la especie humana, como nunca antes en la historia del universo ha vivido. Este es un momento cúlmine en la naturaleza. Una especie corriente, emergida del reino animal, esta siendo llamada por el Conocimiento de lo Absoluto. En algunos acontece, en otros no, pero el camino ya está marcado, el destino esta escrito para nosotros:  vamos a emerger del reino animal y fundirnos con el cosmos, como consciencia reflejada a sí misma.

 Eso es todo, se terminó el juego, la mente es un payaso más del circo, un malabarista de los pensamientos, un equilibrista de los sentimientos:  Pero el dueño del circo ha llegado: Yo, la Consciencia. Y cuando la consciencia llega, ya nada se ve igual. Todo puede seguir funcionando, pero ha perdido su  conflicto, su seriedad, su emoción… todo era un simple juego, una película de la vida.

 Por otro lado, también trajiste el concepto de “dominar la mente”. Con eso no estoy de acuerdo. En un principio dominar la mente puede servir para obsevarla mejor. Como el agua mansa de un lago refleja mejor nuestro rostro, pero, una vez que nos damos cuenta de que ese rostro es una simple imagen, futil y cambiante, ya no nos interesa el estado del lago. El lago es el lago, tiene su propio ritmo; es más, cuanto más intentas detenerlo, agarrarlo, más chapoteás y más turbia se ponen las aguas. Dejalo ser,  al menos no entres en conflicto con su estado de ser. Es realmente una porción muy pequeña de la naturaleza que te rodea. Y vas a poder encontrar aguas tranquilas en otros momentos y en otros lugares. Si ésta está turbia, dejá que sea turbia, así deja de serlo.
 Entonces, más que dominar, yo diría ignorala. La mejor forma de dominar es mediante la indiferencia, ¡sino preguntale a las mujeres! Jaja!  Los hombres no podemos resistir su indiferencia.

 La última pregunta es: “¿por qué aceptas un conocimiento confuso y que alimenta a lo causante de tanta desigualdad y desasosiego en el mundo?”

 En realidad, lo causante de la desigualdad y desasosiego es el desequilibrio entre el Ser y el conocimiento.
El Ser puede traer confusión tanto como el mero conocimiento. Confusión viene de desorden, desorden viene de desequilibrio, desequilibrio viene de que uno de los dos polos o balancines de la existencia esta más lleno que el otro.
 Si me lleno de Ser, no voy a poder actuar, puesto que ese conocimiento no me guía a nada.
 Si me lleno de conocimientos meramente mentales, voy a actuar en desequilibrio y terminaré actuando mal.

 Entonces, lo confuso no es el conocimiento de la filosofía clásica, lo confuso es consumir mi vida ahí. La filosofía, como todas las ciencias, nunca van a dar una respuesta a la problemática de  Lo Que Es.  Pero sí pueden aportar mucho a equilibrar la balanza de nuestra existencia, como humanos.
 Como humanos tenemos un poder que no podemos negar, es el poder de ser conscientes. Y también tenemos un poder que no tenemos por qué negar: es el poder de aprender, comprender la existencia.

 Los dos poderes juntos van a hacer que, en el mejor de los casos, el hombre dé un salto cuántico en su calidad de existir, en su calidad de vida.

sábado, 23 de julio de 2011

¿Cuáles serían mis frutos, las consecuencias?

 En un momento de extremo silencio interno (como pocas veces tengo), acostado en la cama a la noche, en mi habitación que es super silenciosa, he tenido una de esas revelaciones que solo es posible tener con silencio.
 Me dí cuenta que en lo profundo, uno Es. Eso implica estar acá, y eso nos obliga a crear algo.
 Estando acá, en algún momento vamos a crear algo, hacer algo. Algo ocurrirá a través de nosotros, de nuestra existencia. Estamos acá intrínsecamente aferrados a la magia de crear algo. 
 Es una consecuencia de Ser, ¿que voy a hacer?. Estoy acá, algo tengo que hacer. La vida que tengo dentro me obliga a crear cualquier cosa que sea, pero es necesario crear algo nuevo. Es la consecuencia de existir.

 Me di cuenta que la Vida, a través de una planta, crea a la propia planta. La hace crecer. La Vida hace eso.
 Y no tiene un límite, si las condiciones son favorables, el ser seguirá desarrollando su forma, brotará. Una vez que se ha estabilizado, comienza a crear nuevas ramas, nuevos tallos, saca flores, muestra colores.
 Pero crea, algo tiene que crear.
 Más vale crear belleza y verdad.

 Cómo quisiera ser una planta, y florecer por el impulso de la vida, de la verdad, y no de la ambición. Si fuese así ¿cuáles serían mis frutos, las consecuencias?

miércoles, 20 de julio de 2011

Lo que vale la amistad

 Un amigo es una especie de cómplice de la mentira de nuestra vida. Nos ayuda a entender nuestra mentira, a saltar los muros de las calles sin salida en que nos metemos. Y si con suerte tenemos un amigo inteligente, nos ayuda a salir del laberinto de relaciones sin sentido donde hemos entrado, no sabemos cómo ni por qué.
 Qué buen amigo, te presta su oído para que le cuentes la estupidez que te dijo tu jefe.
 Qué buena amiga, está en frente tuyo para ayudarte a clavar un poco más la máscara de personalidades que se te desclava con el tiempo de la cara.
 Qué buena amiga, te escucha cuando criticas a la vecina.
 Qué buen amigo, te ayuda a forjar los cimientos de un proyecto, ambicioso y estúpido que te llevará a la infelicidad.
 Qué buen amigo, allí está como un muñequito de torta parado en la torta de tu vida, viendo como te haces torta el corazón, sin saber para que quinotos es una torta tan complicada.
 Qué buena amiga, sos el reflejo de mis pensamientos, de lo que quiero que seas si queres estar a mi lado. Mis pensamientos son los tuyos, y los tuyos son los míos, sino... ¿cómo podríamos ser amigas?.

 Un amigo es alguien que no entiende nada de nosotros, pero conoce nuestras debilidades, y se aprovecha de ellas para no estar solo en la vida.
 La amistad se alimenta de debilidades, no de fortalezas, solo dos débiles pueden ser amigos; las partes fuertes dentro nuestro se paran por sí solas, no necesitan muletas.
 Un amigo es como la muleta de la discapacidad de la vida. Quien tiene un amigo es un discapacitado mental y espiritual. Quien tiene un amigo esta caminando por el sendero equivocado, y necesita ayuda. Si el sendero que caminamos es sencillo y no somos discapacitados, ¿para qué necesitamos una muleta?. Pero obviamente el sendero que elegimos es bien complicado, resbaladizo, empedrado y además somos discapacitados mentales... claro que necesitamos uno o muchos amigos, una o muchas muletas.
 Ahora en Estados Unidos se invento una muleta multidimensional. Es una muleta que cubre arriba, abajo, izquierda, derecha, adelante y atrás; cosa que no nos caigamos y no nos vaya a doler. Vienen 6 muletas en una. ¡Y no solo eso!  la muleta tiene un sistema de micrófono, si le contás una mentira, sale otra muleta automáticamente por el costado que lo necesites. Si seguís contando mentiras, siguen saliendo muletas. Cuantas más mentiras cuentes, más muletas tenes.
 Se sabe de alguien que rompió el record y llegó a ser presidente de su país. De modo que compren YA el producto, los va a llevar por el sendero del éxito, y cuando lleguen al final, una gran torta de infelicidad les espera para comérsela usted solo.

                           Suerte mi amigo, sea feliz

sábado, 16 de julio de 2011

El Secreto de la vida y el Silencio de la vida

 Muchos sabemos mediante un boom de energía positiva y espiritualidad "El Secreto". Aparentemente nos estamos dando cuenta de que 'lo que pensamos lo atraemos'. Muy bien, de a poco nos vamos haciendo cargo de nuestro poder animal, los animales tambien piensan, tienen actitudes, y asi generan su realidad. Hasta acá, el secreto de la vida es para todo el reino animal incluso nosotros.
 Lo que no es para todo el reino animal, es el cambiar lo que pensamos. El individuo humano puede, por sí mismo, buscar las vías, las experiencias, para adquirir la energía y la posibilidad de cambiar, cambiar el rumbo de la vida. Eso es algo no pueden hacer los animales.
 Ahora bien, como todo secreto, se puede utilizar de manera equivocada o acertada, en contra de la vida misma o en pro de vivir, estúpida o realmente. Básicamente la ley de atracción consiste en generar una imagen mental lo más solida posible y de esta menera, con nuestro "poder", vamos a hacer que se manifieste en el plano físico: es totalmente cierto: creamos aquello en que nos concentramos, repito, creamos aquello en que nos concentramos.
 Pero eso no quiere decir que crear sea algo bienaventurado si estamos llenos de ambición, complejos, baja autoestima, dependecias de todo tipo, rencor, ansiedad. Tenemos que saber que crear desde un centro así, no es el secreto de la vida.
 La mejor forma de utilizar el secreto de la vida es crear desde el Silencio de la vida. Un silencio en donde todo es transparente, inocente, donde en realidad no hay expectativas de lo que se crea. La base, el silencio, ya está, lo que creamos es secundario. Cualquier cosa que creamos es secundaria.
 Realmente es un secreto extraño, pues es un secreto que para la humanidad ha quedado pequeño. Es un pequeño secreto. Es cierto, y no todos lo saben, pero es pequeño al lado del verdadero poder del Universo, el Silencio profundo que se encarnó en la especie humana. El refugio de paz y de dicha que brota del centro humano. Como dijo un poeta: Yo celebro ese lugar, donde todos somo Uno.
 Entonces, el secreto de la vida debe venir acompañado del silencio de la vida. De hecho, el silencio de la vida lleva consigo el secreto de la vida. Pero deja de ser importante, puesto que ya no hay un 'yo creador', el creador es el Universo, Todo, manifestándose mediante mí.
 Si el Universo crea a través de mí, ¿Qué necesidad real hay de que 'yo' intervenga? ¿Acaso yo puedo crear algo más acertado que lo que el Universo considera para sí mismo?

martes, 12 de julio de 2011

La leyenda del cumpleaños de 15 Jamás Imaginado

 Cuenta una leyenda, que para un cumpleaños de 15, una familia decidió hacer una fiesta maravillosa. Una fiesta inimaginable, aún más inimaginable de lo que la mente más creativa sobre la Tierra pudiera imaginar.
 La mamá de la nena iba a encargarse de los trajes de todos los familiares, desde el primo más chiquito hasta el tío más longevo. Ella era sastre, e iba a producir con sus propias manos, artesanalmente, los trajes y vestidos de toda la familia. Con diseños y colores exóticos y elegantes a la vez.
 El papá de la nena iba a ser encargado de cumplir el sueño de la bella protagonista, iba a llamar al mejor técnico del mundo para construir un cohete con forma de guitarra y enviarlo a la luna. Así su niña podría viajar en el y conocer a nuestro satélite querido. No era terea fácil, pero era aquello que más le conmovía realizar por su amada hija.
 Uno de sus dos hermanos, el mayor, con 25 años, recién se había recibido de abogado, y por una serie de influencias y contactos, rogando hasta la última posibilidad, exprimiendo la última gota a cada persona; logró traer para aquella noche tan especial a su Majestad: La Reina de Inglaterra. No fue fácil, pero era lo más que podía hacer por su apreciada hermana. Ella tenía un poster de la Reina de Inglaterra en su habitación.
 Todos sus tíos, los 7, se unieron en una tarea aún mayor. Pero de distintas maneras consiguieron lo que para cualquiera de nosotros sería increíble, insospechable, imposible; pero que según cuenta la leyenda, ocurrió en verdad: en su quinta de fin de semana, esa noche, la de la fiesta, estaban esperando arriba de un escenario montado con joyas y lingotes de oro, tomando un champú, Aerosmith, U2, Lady gaga, Madonna y los Rolling Stones. Los tíos habían sido testigos de cómo su sobrina admiraba a todas esas estrellas, cantaba y bailaba tan bien al ritmo de su música.
 Por último, los abuelos, con toda la experiencia en cumpleaños, decoraron el salón. Al terminar, era el salón más bello, más armonioso y cálido que ninguna ñieta, que ninguna niña, pudiera imaginarse jamás, jamás. Todos los colores, todos los modelos de guirnaldas, todas las luces, las formas, los adornos, las velas, la fuente de chocolatada, la montaña rusa, los sanguchitos de calabrese que tanto le gustan.
 Todo estaba listo, increíblemente listo.
 Era la tarde del día anterior a la fiesta, a la mega fiesta de cumpleaños inimaginablemente jamás sospechada.
 Esa tarde, el hermanito menor de Constanza, de 4 años, pregunta a sus padres: ¿Y la torta? no me la mostraron.
 ¡La torta!  ¡todos se habían olvidado de la torta!
 El niñito de sólo 4 años dió un sermón a los padres que, según cuenta la leyenda, fue el sermón más increíble jamás escuchado de un niño de menos de 5 años a sus progenitores:
 -¿Dónde están sus cabezas? ¿En qué se ocupan tan afanosamente? ¿Qué creen que están haciendo?  Están haciendo una fiesta. -Ante semejantes palabras de firmeza desde una voz tan frágil, todos los familiares no pudieron desoír y fueron llegando boquiabiertos al lugar del desconcertante episodio-. Están haciendo una fiesta -dijo Mateo indignado-, todas esas cosas que prepararon, ¿para qué eran? ¿con qué fin gastaron tanta energía?  Ahora los músicos no van a querer tocar, el cohete no va a querer funcionar, porque les prometieron que iban a estar en una fiesta de cumpleaños pero ¿Qué clase de cumpleaños no tiene torta?  falta lo principal, falta el centro de este Universo. ¿Qué clase de Universo no tiene estrellas, qué clase de planta no tiene raíces?  No debieron haber olvidado a lo principal, a lo que hace a un cumpleaños ser un cumpleaños, a lo que hace a un árbol tener forma de árbol, al calor que hace al Sol ser lo que és, al eje que permite a la calesita funcionar sanamente, saludablemente; al recipiente que permite a la pileta ser pileta, a la profundidad que marca el carácter de un océano, a la Tierra sobre la que se apoyan las montañas... No se olviden, el centro, el silencio de ser humanos. Sino van a seguir creando fiestas sin torta. Van a seguir creando, pero no van a gozar de lo principal, de la Vida, de estar vivos.-

lunes, 11 de julio de 2011

La urgencia de silencio y el silencio en sí

  Realmente hay una urgencia de silencio en la vida humana. La mente humana ha creado miles de capacidades, ha evolucionado para sí misma. Ha evolucionado para la criatura que habita: la especie humana. La especie humana ha ido más allá de lo que siempre pudo imaginar. Ha superado su propia imaginación, su propia mente.
 Después de estos cientos de miles de años de existencia, la existencia humana comienza a experimentar sed. Como un honesto trabajador, como un imparable obrero, como un implacable científico, comenzamos a sentir sed. Esta sed es muy significativa. La sed es sólo una señal. Nuestro cuerpo se está deshidratando, nuestra alma se esta comenzando a deshidratar también. El mejor remedio para la sed del cuerpo es el agua, sólo el agua; el mejor remedio para la sed del alma es la verdad, sólo la verdad. ¿Qué verdad? esa verdad se puede describir, como el agua. Esa verdad es observarnos a nosotros mismos viviendo desde una verdad. Cualquiera que sea la verdad. Nuestra sed está en ver cómo el rumbo de nuestra vida esta siendo guiado por la verdad, cualquiera que sea. Vernos a nosotros mismos actuar con una verdad es saciar la sed del alma. Es música para los oídos, oir la verdad, oírnos diciendo la verdad. ¿Cuánto tiempo puede uno guardar una mentira, sostener una mentira? cuanto más empecinados estemos en aguantar la sed.
 Hoy en día los humanos experimentamos mucha sed. Tiene su motivo, tiene su lógica: hemos trabajado duro por miles de años. Hemos creado una civilización maravillosa, con todos los edificios, la variedad de diseños, distintos modos de almacenar información, distintas teorías para explicar el universo... Después de haber trabajado tanto afuera, sobre el mundo, sobre los objetos... comienza a haber una urgencia: saber quienes somos, para qué hacemos lo que hacemos. Hemos hecho tanto, tantas fórmulas, tantas técnicas, tantos edificios, tantas investigaciones. Pero todavía no podemos responder con facilidad esta pregunta: ¿cómo digo la verdad? Decir la verdad es algo extraño en este mundo.. ¿en que sentido hemos evolucionado?  Hemos construido y construido, ¿será que la  urgencia de hoy en día esta en cómo construir una vía para decir la verdad, hacer la verdad, verme con verdad? ¿Qué más queda en este Universo? ¿Qué más nos queda por hacer? Hicimos todo lo que era posible en esta existencia, salvo una cosa: Vivir con verdad.
  Si no vivimos con verdad, nos transformamos en nuestros propios enemigos. Primero individualmente, después colectivamente, y después mundialmente. Ahí esta la urgencia. Es lo último a lo que el ser humano debe enfrentarse: vivir con verdad.
 Es necesario vernos más allá de la mente para vivir con verdad, es necesario vivir más allá de la mente para vivir con verdad. Es imprescindible comprender el oceano de silencio en el que está sumergida la vida, con el fin de ver la verdad.
 Es por eso que pido silencio.
 No para acabar con lo que hemos construido, sino para continuar, construyendo algo nuevo. Algo que es necesario y es nuevo: silencio en el corazón, verdad.
 La urgencia de silencio no debe hacernos ruido, ese ruido es un ruido infantil, el miedo infantil de quedarnos solos, con nuestra verdad. Por eso, más allá de la urgencia del silencio, lo mejor es el silencio en sí. El silencio nos lleva a la verdad, a ver la verdad. Esa verdad nos une al Todo, nos permite gozar de todo lo que es la vida. No nos deja solos, nos une a la vida, a nuestra Vida.